jueves, 31 de julio de 2008

¿Cuánto celo hay en nosotros?


Qué profundas palabras de Nuestro Señor: "Yo reprendo y castigo a todos los que amo; se, pues, CELOSO, y arrepiéntete" (Apocalipsis 3:19)


¿Podemos decir que hay celo por las cosas de Dios en nosotros? ¿Existe verdadera pasión en nuestra alma por mantener puro el evangelio?

Jesucristo no solo dijo que "la reprensión y el castigo" eran parte de Su Amor, sino que tambíen mencionó la "falta de celo", que a esa altura del partido, Él ya podía ver en la iglesia.


Este versículo me lleva a pensar en lo que se predica en las congregaciones hoy por hoy: mensajes que animan al éxito, a la autorealización donde el Señor, más que Señor se transforma en un "viejo pascuero", que trae las cosas que nosotros deseamos tener.


A juzgar por lo que se escucha y ve en la llamada tv cristiana, temas como la cruz, la negación de uno mismo, el espíritu sacrificial, la santidad de vida, y otros, son temas olvidados (o quizás puestos a un lado a propósito?). Tengo la fuerte impresión de que las grandes iglesias están más dedicadas a satisfacer los deseos de los hombres antes que las demandas del Señor, que por cierto, no han cambiado.


Para tener un "verdadero avivamiento" se necesitará volver a la predicación apostólica. Y ya que está tan de moda el apostolado en nuestros dias, yo les exijo en el nombre de Jesucristo:

Que prediquen el mensaje que predicaron los apóstoles del Señor (arrepentimiento, doctrina apostólica). Que estén dispuestos a pagar el precio que pagaron los apostóles del Señor (persecución). Que estén dispuestos a vivir como vivieron los apóstoles del Señor (sencillez).


La biblia dice "traían el precio de lo vendido y lo ponían a los pies de los apóstoles y se repartía a cada uno según su necesidad". (Hechos 4:34-35)


Cuando Pedro y Juan fueron requeridos de una limosna el APOSTOL Pedro dijo "NO TENGO plata ni oro". ¿Cómo, no tenía dinero o estaba mintiendo para no dar? Sabemos que no estaba mintiendo, por tanto, NO TENIA DINERO, pero atiende a lo que dijo: "lo que TENGO te doy: levántate y anda". ¡¡Gloria a Dios!!

Pedro le dió algo más que un mensaje de ánimo o autorrealización, le dio (en el nombre de Jesucristo) una vida totalmente nueva.

Lo triste es que los apóstoles modernos se quedan con los recursos y dejan a la gente en la misma condición de necesidad espiritual. Porque dinero es lo único que tienen a diferencia de Pedro que tenía la vida y poder de Cristo morando abundantemente en él y por eso la podía compartir.


Exijo a los que dicen ser apóstoles (y no lo son, ver Apocalipsis 22) que demuestren la veracidad de su ministerio mediante sus frutos. ¡Cuidado! Tener un gran templo no es un fruto espiritual


Muchos de los llamados apóstoles de hoy son gente que vive cada vez más acomodada en términos económicos, porque los recursos se quedan a los pies de los apóstoles modernos y no van a parar a aquellos que tienen necesidad.


"Falsos profetas de la comodidad" que lejos de urgir al pueblo a una verdadera conversión y compromiso con Cristo, les adulan con palabras infladas, para hacerles sentir cómodos y les presionan usando la bilbia para que la gente haga un compromiso con ellos y así no perder el apoyo económico.

¿Qué van a hacer cuando muchos de aquellos a quienes les han asegurado la entrada al cielo, se queden fuera por no haberles entregado el mensaje verdadero?


Quiero recordarles (por amor a ustedes mismos), que fue el Señor quien dijo que la reprensión y el castigo eran parte del amor verdadero. Uno corrige a quien ama, precisamente porque lo ama, pero al asalariado no le importan las ovejas, sino lo que recibe de las ovejas.

Prefiero ser catalogado de duro y saber que estoy siguiendo los pasos de Cristo (a ÉL le dijeron lo mismo) antes que pecar de blando o permisivo y llevar a la gente por un camino equivocado. Después de todo un hijo tarde o temprano agradecerá no a los padres permisivos que les dejaron hacer lo que querian sino a los que en verdad les enseñaron lo necesario para la vida.


El siguiente punto es el "celo", pero lo dejaré para la próxima.

¡¡Dios unge nuestros ojos con colirio para que veamos!!

Pastor Gabriel.

09 8 2535073