lunes, 15 de diciembre de 2008

Jesús nos cambia la vida


Se estila mucho en nuestro medio, procurar que las personas se sientan bien en Cristo. Es como si tener a Cristo, fuera sinónimo de alguna vitamina o elixir que provoca un sentir de bienestar en las personas. Y aunque es innegable que el tener a Cristo (o que Él nos tenga) genera en nosotros una serie de beneficios, es erroneo vivir en pos de tales beneficios. Pero lo que Cristo desea verdaderamente hacer en nosotros es "cambiarnos la vida".

Cuando Jesús le sale al encuentro a Saulo de Tarso, le provoca una caida a tierra que provocó un cambio tal en él como persona, que cuando se levanto de tierra ya no podia caminar solo, porque quedo ciego. Como puedes notar: su encuentro con Cristo lo cambió.

Jacob, luchando con el angel, al levantarse una vez acabada la lucha, ya no caminaba igual, cojeaba a causa de su encuentro con el angel del Señor (hay mótivos para pensar que era Cristo). Como ves su vida cambió.

Después de haberte encontrado con Cristo ¿como ha ido tu vida? La mayor evidencia de que Cristo realmente vino a nuestras vidas es un cambio interior que se hace manifiesto exteriormente, al punto que todos lo pueden ver. No se trata de un secreto que debamos guardar, por el comtrario, la voluntad de Dios es que todos puedan saber, es decir, oir pero especialmente ver, el cambio de vida que la venida de Cristo ha provocado en mi.

Sin importar cuanto tiempo lleves congregándote, la evidencia de que hemos nacido de nuevo será un cambio de vida, de hábitos, de costumbres.

Es triste ver personas que dicen ser cristianas y que no han experimentado más cambios que el hecho de asistir a alguna congregación de vez en cuando, y de haber aprendido un par de expresiones religiosas.

Pero la venida de Cristo a la vida de alguno inevitablemente traerá cambios. los cuales serán tanto para el provecho de la persona como también del propósito de Dios para esa vida.

Cuando un ciego se encontraba con Cristo recibía la vista, cuando un paralítico se encontraba con Jesús se iba caminando a su casa, cuando un endemoniado se encontraba con Cristo era liberado... y así la escritura está llena de ejemplos que nos demuestran que cuando Cristo verdaderamnete ha venido a la vida de alguien, esa vida nunca vuelve a ser lo que fue. ¡¡Eso es un verdadero avivamiento!! ¿Lo has experimentado?

martes, 18 de noviembre de 2008

¿Qué tenían ellos?



Cuando abordamos el tema del avivamiento espiritual nos encontramos con nombres que son representativos de lugares que fueron sacudidos por el poder de Dios.

No olvidemos que un avivamiento es "tener a Dios moviéndose con libertad y poder entre nosotros".

Evan Roberts, Seymour, D.Moody, Ch. Finney son algunos de los nombres que salen a la luz a la hora de hablar de avivamientos espirituales. Y hay tanto de ellos que necesitamos imitar. ¡¡Pero esos nombres tienen al menos 100 de antigüedad!!.

El mundo necesita HOY gente como ellos que fueron instrumentos usados por el Señor para sacudir las sociedades en que vivieron.

¿Qué tenían ellos? Creo que es una buena pregunta que requiere análisis profundo.

Desde un punto de vista exterior eran hombres como cualquiera de nosotros pero por dentro tenían un objetivo claro, definido, una pasión y deseo intransables: tener más de Dios.

Se caracterizaron por BUSCAR A DIOS, apartarse de lo que NO ERA DE DIOS, VIVIR de acuerdo a LA PALABRA DE DIOS.

No parece tan difícil, pero estas cosas fueron las que les llevaron a levantar a Cristo de modo que el mundo pudo ver que Dios era real y Dios pudo también proveerse de vasos sobre los cuales derramar Su Presencia.


Fueron gente que no contaba con los adelantos ni tecnología que tenemos hoy, pero que sin lugar a dudas, tenían lo que a nosotros nos falta.

Creo que Dios hoy, así como en el tiempo de esos hombres DESEA manifestarse y darse a concoer de manera poderosa, pero está lamentablemente limitado por la FALTA DE INSTRUMENTOS, gente como ELLOS que no tenían nada espècial, pero que a la vez tenían todo.

¿Que tenían ellos? Tenían a Dios o quizás debiera decir, "Dios los tenía a ellos".

Tu tienes a Dios, pero Él ¿te tiene a tí?

martes, 11 de noviembre de 2008

Amo a Cristo, pero ¿a la iglesia...?


Hablamos mucho de la iglesia, de lo bueno que es para nuestra vida, familia, sociedad, etcétera, pero ¿ocupa la iglesia el lugar que debería ocupar en nuestras vidas?

Jesús amó a la iglesia al punto que se dió así mismo por ella. No solo tuvo buenas intencionas para con ella, sino que se ofreció por ella. En otras palabras, fue una prioridad en su vida.

La única forma en que podamos experimentar un real avivamiento es que lo que es prioritario para Dios llegue a serlo también para nosotros.

Es triste pensar que muchos de los que proclamamos ser cristianos y amar a Cristo, NO AMAMOS lo que Crsito tanto amó: la iglesia.

Si Cristo se dio por ella entonces vale la pena que nosotros hagamos lo mismo. ¿Qué tendrá que pasar para que lo entendamos?

El avivamiento tiene que ver con revivir lo que está muerto, y si hay algo que necesitamos revivir hoy día es la pasión por colocar en el centro de nuestras vidas lo que es central para Dios.

Lo más importante para Dios es la iglesia. Por ella se dió el Hijo, por ella fue enviado el Espíritu y gracias a ella nosotros tenemos parte en un trabajo que traspasa el tiempo y el espacio.

Mucha gente dice: "Yo amo a Cristo pero ¿a la iglesia?"

Creo que un avivamiento nos hará amar lo que Él ama y aborrecer lo que Él aborrece.

De otro modo, seguimos muertos en nuestro egoista estilo de vida.

martes, 21 de octubre de 2008

La Mentalidad y el Avivamiento

Nos guste o no reconocerlo, "somos lo pensamos". La pobreza, riqueza, generosidad, avaricia, santidad o cualquier otro camino que decidamos seguir, son la consecuencia de un acto deliberado del pensamiento.

Se trata de determinar en nuestro pensamiento (corazón) a qué nos vamos a dedicar.

Nuestra mentalidad determinará el norte y orientará las velas de nuestra embarcación. Por ello es tan importante pensar en lo que pensamos, porque a la postre, somos el producto de una mente.

La escritura habla de "una mente reprobada" que hace a los hombres escoger hacer cosas que no les conviene. Atrayendo así sobre ellos la ira de Dios.

Pero también dice que tenemos "la mente de Cristo", lo que nos permite pensar sus pensamientos y por tanto llegar a hacer sus obras.

Antes que el avivamiento llegue a ser una realidad palpable en las congregaciones, comienza como un pensamiento y sin lugar a dudas el punto de partida es la mente de Dios, quien a su vez lo transmite a Su Iglesia por medio de Su Espiritu.

El pensamiento de un cristianismo de mayor nivel nos llevará inequívocamente a una revolución espiritual que teminará en avivamiento. Por ello es tan relevante que afinemos nuestros pensamientos con los del Señor, quien conociéndonos nos recuerda que "sus pensamientos son más altos que los nuestros".

La bendición de tener Su Espíritu morando en nosotros nos otorga la gran oportunidad de pensar lo que Él piensa y canalizar Sus Planes.

Somos colaboradores de Dios en la tarea de la redención, y para ser efectivos como Cristo, Pedro o Pablo, tendremos que llegar a ser poseidos por la misma mente que los que poseyó y llevó a hacer todo lo que hicieron: la mente del Cristo.

El avivamiento es la idea perfecta de Dios para Su Iglesia y Su gran trabajo es colocar en la mente de Su Pueblo ese bendito pensamiento.

jueves, 9 de octubre de 2008

Yo soy un hijo de Dios, ¿por qué no me creen?


La gloriosa iglesia de Jesucristo hoy día no se ve tan gloriosa, y no porque su fundador haya perdido Su Gloria sino porque los seguidores hemos adoptado un estilo de vida antojadizo que para el Señor es inaceptable.

Las congregaciones cada vez más numerosas cuentan entre sus filas con personas que se denominan "cristianas", que proclaman ser salvos, que dicen haber hecho a Cristo el Señor de sus vidas, pero que siguen viviendo "a su manera".

El extinto cantante popular Frank Sinatra se hizo mundialmente famoso con un canción del mismo nombre. y si bien para una canción el título puede estar bien, no lo está en absoluto para hombres o mujeres que proclaman haber nacido de nuevo y tener dentro de ellos la naturaleza divina de Cristo. Es inaceptable que alguien que le entregó su vida a Cristo siga viviendo "a su manera".

Personas que caminan contigo hasta que tu les dices que hay cosas en sus vidas que no andan bien, que deben ser corregidas pero son incapaces de reconocer que necesitan cambiar. Culparán a medio mundo evitando asumir su responsabilidad.

Ser cristianos es mucho más que leer la biblia, hacer un par de oraciones, dar un poco de dinero y aprender el lenguaje que se utiliza en las congregaciones. Ser cristianos es estar claros que ya no importa lo que "yo pienso o quiero", sino "lo que Cristo piensa y lo que Él quiere de mi y para mi".

El egoismo prevalece en los círculos evangélicos. Los cristianos viven a su manera, se congregan cuando se les antoja (sus biblias parecen no tener escrito Hebreos 10), se sujetan a sus propios conceptos e interpretan la Palabra a su antojo.

Cuidado con la manera en que vivimos nuestro cristianismo, ya que estoy seguro que "aquel día" nos llevaremos muchas sorpresas, especialmente aquellos que están acostumbrados a hacer lo que quieren y no se sujetan más que a su propia doctrina.

No existe tal cosa como ser un hijo de Dios a mi manera. Dios dejó los patrones, las pautas y el ejemplo de lo que le es aceptable. Por eso, aunque muchos lo griten a los cuatro vientos, simplemente no se les puede creer que sean cristianos, ¿la razón? Jesús dijo "por sus frutos los conoceréis". No por lo que dicen, ni por lo que aparentan, sino por lo que son.

He aprendido que la única manera de averiguar si una oveja es lo que parece y no un lobo vestido de oveja, es apretándola un poquito. Una verdadera oveja responderá con un balido y un lobo con un gruñido. Al lobo descubierto, aunque siga vestido con piel de oveja nadie le creerá que es una oveja.

¡¡Cuidado pastor, muchos lobos se ocultan entre aparentes ovejas que viven a su manera!!

viernes, 3 de octubre de 2008

Mi Concepto de Dios


Si hay un tema relevante para todo hombre y mujer nacidos de nuevo, es el relacionado con "su concepto de Dios".

La relación de todo creyente con Dios estará determinada por el concepto que uno tenga de Dios. Es más cada cosa que hagamos y relación qe estbñecemos está limitida al concepto que tengamos del asunto o persona en cuestión.

Por ejemplo, algunos creyentes se acercan con mucha naturalidad a su pastor sabiedo ques una persona de confiable, sencilla, cercana, ideal para buscar un consejo que de veras sirva. Para otroa, el pastor es una figura distante, casi inalcanzable, casi perfecto y que vive en otro nivel espiritual por sobre el resto.

Hablemos del estrado donde está el púlpito. Alguos no osarían si quiera acercarse a el por tratarse de algo santo que si me acerco descuidadmente odría hasta acarrear la ira de Dios.
En tanto, existen hermanos que con toda naturalidad se acercan, deambulan y hasta "se apoyan" en el púlpìto, sin sentir el más mínimo temor de nada. ¿Entiendes?

Bautistas, pentecostales, presbiterianos, carismáticos y otros estarán determinados a relacionarse con Dios de acuerdo al concepto que sus organizaciones tengan de Él.

Por tanto, nuestra teología será determinante en la clase de relación que lleguemos a establecer con el Señor.

El gran problema de los religioso judíos no era que no creyeran en la promesa del Mesías que vendría, sino el concepto que tenían del mismo.

Aun el propio Juan el bautista, siervo de Dios como era, fue confrontado a causa de lo que veía hacer a Jesucristo. Juan tenía un concepto que le hizo dudar si Jesús era realmente el que "había de venir".

Juan de acuerdo a su concepto, sabía que cuando el Mesías viniera pondría el hacha a la raíz del árbol, condenaría a los malos en el infierno, limpiaría su era, quemaría la paja en fuego que nunca se apaga, traería la justicia, establecería el reino de Dios en la tierra y otras cosas más, que "no veía en Cristo". Todo lo contrario, Jesús compartía con "prostitutas y pecadores" y era acusado de ser bebedor de vino. Esto confundió a Juan, quien en primera instancia habia testificado diciendo "he aqui el cordero de Dios que quita el pecado del mundo" pero luego estando en prisión mandó a sus discipùlos a preguntarle a Jesús si era Ël a quien esperaban o deberían esperar a algùn otro".

Como puedes ver no fue lo malo que vió en Jesús (quien de hecho no hizo nada malo) sino "el concepto que tenía acerca del Mesías" lo que le llevó a confundirse.

Por esta y otras razones es tan importante determinar cuál es nuestro concepto de Dios.

Congregaciones se vuelven legalistas o libertinas en su actuar solamente como consecuencia de su concepto de Dios: para algunas Dios es distante y estricto, mientras que para otras es sencillamente más cercano y relajado.

En algunas congregaciones se alaba a Dios con música estridente, saltos, aplausos y hasta silbidos, en tanto que en otras, se puede oir el vuelo de una mosca porque todo se hace silenciosamente. como una muestra de reverencia y santidad.

Yo te pregunto ¿Cuál es tu concepto de Dios? Deberías tenerlo claro porque el éxito que tengas en el cumplimiento de Su voluntad en tu vida dependerá de este asunto específico.

Bendiciones, pastor Gabriel

miércoles, 17 de septiembre de 2008

¿Libres?


Marcos 9:25 "...(Jesús)reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: espíritu MUDO y SORDO, yo temando, sal de él, y no entre más en él"

En su ministerio terrenal, nuestro Señor se enfrentó muchas veces a la situación de personas que estaban poseídas por espíritus inmundos. Estos malos espíritus provocaban principalmente un mal: ataban a las personas. Las mantenían cautivas, prisioneras, esclavas. El enemigo desea esclavizarnos (y vaya que le funciona). Nos esclaviza a tantas cosas, una de las más peligrosas: el engaño.
Cuántas personas que proclaman ser libres están atadas a las más diversas cosas: costumbres, hábitos, personas, lugares, instituciones, vicios, adicciones, doctrinas de hombres,y un sin fin de cosas más.

Gracias a Dios en Cristo está el poder para libertarnos. Sin embargo, a veces los discípulos (ministros) del Señor no tenemos la autoridad (espiritual) necesaria para romper tales cadenas, como ocurrió con los discípulos en estos versículos. EL Señor les explicó que "no habían podido libertar al muchacho por su "falta de ayuno y oración"(ver verso 29). Lo que a las claras pone en el tapete un problema no menor de nuestros días: la falta de consagración en la comunión (oración) y negación (ayuno), dos aspectos que el Señor mostró como responsables de su incapacidad para libertar al muchacho.

Para llegar a experimentar un verdadero avivamiento necesitaremos volver a este arte perdido de la oración y el ayuno, cosas que hoy por hoy no van con el mundo actual.

La oración requiere de "tiempo" ylo que las personas menos tienen hoy es tiempo. La verdad hay tiempo, pero NO PARA EL SEÑOR.

Por otro lado, el ayuno requiere de un espíritu sacrificial y hoy muy pocos están dispuestos a sacrificar algo. Queremos todo fácl, todo regalado, muy pocos están dispùestos a pagar un precio en las cosas de Dios. Es más cómodo decir que Cristo ya pagó el precio (y esto es cierto en un modo. Él pagó por los pecados del mundo haciendo lo que ningún otro podría haber hecho: "satisfacer las demandas de Jehová y cumplir la ley de Dios"), pero también la Palabra dice que debemos negarnos, esforzarnos a entrar por la puerta angosta y otra serie de directrices divinas. Hay una parte que nos corresponde a nosotros en el asunto de la redención.

Sin estos dos elementos (oración y ayuno) no habrá avivamiento espiritual.

El muchacho al ser libertado por Jesucristo vivió y con él su padre y todos los que le pudieran haber rodeado. La cuestión es: no sólo recibió palabras dde aliento sino recibió el toque de DIos con el poder para CAMBIAR SU VIDA para siempre ("y no entres más en él", sentenció Jesús al demonio)

¡¡Como necesitamos entender lo que implicó para el mundo de los demonios que Jesucristo antes de ascender dijera a los suyos: "recibiréis poder cuando el Espíritu Santo haya venido sobre vosotros"!!

Este espíritu tenía la muchacho mudo y sordo, incomunicado, atrapado en una vida de silencio.

¡¡Hoy muchos que claman ser libres están atrapados por el mismo espíritu, temerosos de hablar e incapces de escuchar la palabras verdaderas de Dios!!

Les recuerdo mis queridos hermanos que el diablo no se ha convertido. Es la misma serpiente antigüa usando ropas nuevas, haciendo las mismas obras, atando enmudeciendo, ensordeciendo a los cristianos tibios.

Abre tu boca en un acto de fe y proclama que Jesucristo reina. saacude de tí los lazos del malignos. Jesús sacará a luz la voz ahogada que hay en tí y cambiará tu silencio por un río de alabanzas.

Escucharás las más bellas palabras que un esclavo puede escuchar: ERES LIBRE.

Dios te bendiga

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Es cuestión de naturaleza


Juan 3:3 "De cierto, de cierto te digo, que el que no NACIERE DE NUEVO, NO PUEDE VER el Reino de Dios"

Muchas veces me he preguntado porqué hay tantas personas en las congregaciones a las que les cuesta tanto seguir al Señor. No me refiero a las luchas típicas del discípulo verdadero (ataques del maligno, persecuciones, tribulaciones, etcétera), sino a situaciones que, a mi juicio, para una persona verdaderamente nacida de nuevo, no deberían suponer ningún problema.

Hablo de personas para quienes todo es una lucha: el hecho de congregarse, de aportar económicamente, orar, adorar, estudiar la Palabra, todo lo anterior "les cuesta un mundo". ¿O debería decir les cuesta EL mundo?

A mi me preocupa este asunto, porque encontrar a una persona que "dice ser cristiana" luchando por no ser mundana , es simplemente una contradición.

Al contrastar esta situación con la vida de los hombres que sirvieron al Señor me doy cuenta que la distancia es abismante, aun cuando la Palabra una y otra vez nos recalca que eran hombres sujetos a pasiones como tú y yo.

Creo entonces que la diferencia radica en su naturaleza.

No importa cuánto esfuerzo haga un taza de porcelana por convertirse en un vaso de plástico, nunca lo logrará. ¿Por qué? Por una cuestión de naturaleza.

Hay animales salvajes criados en cautiverio que a pesar de haberse criado lejos de la vida salvaje, han deconocido a sus amos, y en algunos casos incluso han dado muerte a alguno. Esto se explica sólamente por un asunto de su esencia animal.

Creo que a muchos que profesan ser cristianos les ocurre lo mismo.

No escribo esto con el afán de juzgar, por el contrario, lo hago con la idea de dar esperanza al alma aflgida que NO entiende CÓMO LE PUEDE COSTAR TANTO seguir a Cristo siendo que el mismo Espíritu Santo que estuvo en Cristo, ahora vive en nosotros.

Lo que quiero decir es que si no has podido actuar como cristiano, vivir como cristiano, pensar como cristiano o hablar como cristiano, lo más seguro, es que esto no ocurre porque no eres cristiano y eso deja la puerta abierta parar que puedas llegar a serlo.

Ciertamente el Señor dijo que en el mundo tendrímos aflicción, pero hay personas para quienes la vida cristiana es en sí causal de real aflicíón. Esto pasa por estar tratando de convertir la taza de porcelana en vaso plástico.

Lo que si es posible, es nacer de nuevo y al recibir la nueva naturaleza, entonces, todo será diferente.

Si estás en esta lucha, escrudiña tu vida y pregunta: ¿Señor, realmente he nacido de nuevo, hay en mi esa nueva naturaleza? Te aseguro que Dios es el mas interesado en contestar esa pregunta. Porque Él sabe que es un asunto de vida o muerte (eterna) para tí.

Y no te asombres. El verso 10 dice algo aún más confrontador: "¿Eres tu MAESTRO de Israel y no sabes esto?". Jesucristo está diciendo: ¿Cómo puedes enseñar algo que ni tú mismo comprendes? No se puede dar lo que no se tiene.

¡¡Por un avivamiento espiritual que restaure la iglesia!!

Pastor Gabriel

martes, 9 de septiembre de 2008

¿Amor Frío?


"Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará" (Mateo 24:12)

En este capítulo el Señor está advirtiendo sobre los eventos que antecederán el fin. No pretendo discutir sobre qué entendemos por fin aquí, me interesa más bien prestar atención a lo que Jesús dice respecto del "amor".

Nada hay más fuerte que el amor. La Palabra lo dice de muchas formas. En muchos libros hace referencia al tremendo poder que emana del amor.

Es más fuerte que la muerte, que el odio y el rencor, que el dinero, que la lujuria, que la maldad misma.

Tan poderoso es, que Dios el Hijo, siendo quien era, y conociéndonos como nos conocía, decidió venir a morir por nosotros, y esto, como la mayor expresión de Su amor.

En el evangelio de Juan quedaron registradas las palabras de Jesucristo cuando dijo: "nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos".

Él pasó la vara y rompió todos lo récords poniendo Su Vida por Sus enemigos. ¡¡Qué grande es el Señor!!

El mismo Señor dice aquí en Mateo 24:12, "el amor de muchos se enfriará". Esto suena algo extraño de buenas a primeras, pero el amor es como fuego que quema en el interior del hombre, provocando celo, pasión, inspirando a veces a hacer las cosas más descabelladas que alguno pudiera pensar, si bien no hace nada indebido, no tiene envidia, ni se jacta, ni guarda rencor.

Por el contrario: todo lo sufre y lo cree, todo lo espera y lo soporta porque el amor NUNCA DEJA DE SER no se termina. Puede enfriarse, pero sigue ahí.

Doy gracias a Dios que no dijera: "y por haberse ACABADO el amor", pero al solamente enfriarse, hay un antídoto para ese mal: el fuego. ¡Gloria a Dios!

Las escrituras dicen que Dios es fuego consumidor, que su Espíritu Santo vino como lenguas de fuego al aposento alto. También dice "¿no es mi Palabra como fuego? Hasta donde yo sé lo único que puede derretir el frío (hielo) es el fuego.

La maldad sin duda seguirá multiplicándose, pero mientras esté el Espíritu Santo en la tierra existirá el fuego necesario para traer de vuelta a los fríos y a lo tibios a una relación de Fuego y vida con el Hacedor.

Eso es avivamiento, lo que vivió Elías cuando el fuego cayó y los "tibios" pudieron calentarse junto a las llamas del Espíritu. Llamas que provocaron el reconocimiento y la necesidad que voluntariamente y a viva voz clamaran ya no con indiferencia: "Jehová es Dios, Jehová es Dios"

Por ello: "Señor manda fuego que derrita el hielo de la indiferencia que tenemos hacia las cosas santas. Permite que a todo el que lea estas líneas, "algo" de esa llama eterna que nada puede apargar, se vuelva a encender en sus corazones. Te lo pido en el nombre de Jesús, amén"

Las muchas aguas(del mundo), no podrán apagar el amor(por Dios)

En el amor de Cristo,
Pastor Gabriel.

jueves, 21 de agosto de 2008

¡¡Señor danos un avivamiento!!


¿Cuántas veces has hecho esta petición al Señor sin obtener la respuesta que en verdad deseabas? ¿Será tal vez que Dios no desea darnos un avivamiento? Por supuesto que no. Todo cristiano verdadero SABE que la voluntad de Dios es traer avivamiento sobre Su Iglesia, entonces ni siquiera podemos pensar en esta posibilidad. Creo que la respuesta va por otro lado y me temo que no nos va a gustar saber el porqué.
Para entender el tema necesitamos mirar al origen de todo, y como el avivamiento es para la iglesia es necesario mirar a la iglesia que recibió el primer avivamiento para poder rescatar de allí los elementos que nos darán la clave.

La primera iglesia en recibir un avivamiento fue la iglesia primitiva. Cuanto se habla de ella, se habla de su poder, de su impacto, de su armonia, de su amor, de la gracia abundante de Dios que había en ella, de su generosidad, de su testimonio, de sus milagros, sanidades, y otras cosas más, todas ellas ciertas, y cosas que vinieron a causa (o como consecuencia) del avivamiento. Pero de lo que poco se habla, es de lo que permitió a Dios traer dicho avivamiento a esa iglesia.

Es necesario atender a un aspecto que fue vital para que Dios PUDIERA traer tal mover de Su Presencia. La vida de Dios no vino al aposento alto por casualidad. Hubo un elemento fundamental que hoy falta y que es esencial para que Dios pueda traer un avivamiento. Se menciona en las escrituras que Jesús no pudo hacer muchos milagros en cierto lugar, a causa de la incredulidad de ellos. esto quiere decir que la falta de fe, fue el elemento determinante que hizo que ese pueblo se quedara sin una manifestacion del poder y la salvación de Jesucristo en una mayor escala.

Permítame hacerle reflexionar por medio del siguiente pensamiento. Déjeme agregar que esta idea no es producto de mi aburrimiento o del ocio, sino de una intencionada búsqueda de Dios por respuestas a la pregunta de porqué el avivamiento parece no querer venir. Digamos también que hablar de avivamiento no traerá un avivamiento, aunque tal vez si despierte en nosotros alguna necesidad por el mismo.

Bueno, el elemento central que impide que las iglesias experimenten un avivamiento es "la falta de muerte", o dicho de otro modo, "la excesiva presencia de vida". Desde luego voy a explicar esta idea a la luz de la Palabra de Dios que es nuestra máxima autoridad en cualquier tema.

Si miramos al antiguo testamento, hallaremos un Salmo (el 133) que nos da una vislumbre del asunto, el verso final dice (3): "porque allí envía Jehová bendición y vida eterna" El contexto es que los hermanos habitan juntos en armonia (verso 1). La pregunta es: ¿Qué condición debe existir para que Dios tenga que enviar vida? La respuesta es: muerte. Dios no necesita enviar vida donde ya hay vida, pero si es preciso que la envie vida donde hay muerte.
La presencia de muerte es el indicador que determina la necesidad de que ÉL envíe vida. Jesús dijo que el sano no necesita médico. Del mismo modo, el que está vivo (o cree estarlo) obstruye la idea de Dios de mandar vida.

Otro ejemplo de esto es el mismo Señor. El Padre no envió al Espíritu Santo a avivar o resucitar (recordemos que "avivar" es traer algo muerto otra vez a la vida) a Jesús antes de morir, ni mientras estaba muriendo, sino que el Padre le levantó por el poder de Su Espíritu, una vez que estuvo muerto.

Esto debería darnos una clara figura del porqué hoy no experimentamos el tan anhelado avivamiento. Estamos tan poco dispuestos a morir a nuestras costumbres, a nuestros malos hábitos, a nuestras ideas, a nuestras actitudes carnales, a nuestro estilo de vida, y a sepultar a la vieja criatura aun cuando el cristianismo mismo está basado en el sacrificio y la muerte, sin los cuales no puede haber vida.

Elías reparó el altar y colocó encima el sacrificio. ¿Qué pasó después? Luego de una brevísima oración (¡¡algo así como 65 palabras!!) el fuego, la presencia, el poder de Dios cayó y consumió todo, lamiendo aun el agua derramada. No sólo vino la presencia que marcó el término del conflicto sobre quien era realmente Dios (Baal o Jehová), sino también vino el juicio sobre los enemigos del Señor. ¡¡Aleluya!!

Los confundidos reconocieron con quién SI ESTABA Dios y pudieron seguirle. Los tibios se calentaron al calor de esta llama divina, los enemigos fueron avergonzados y Dios recibió la gloria que solamente Él merece.

La clave entonces para un verdadero avivamiento está en presentar un sacrificio al Señor. Cuando Él vea el altar reparado (comunión), y el sacrificio (cuerpo muerto, no de algún animal, sino el tuyo y el mío) inevitablemente el fuego caerá para consumirlo y entonces si tendremos un avivamiento de fuego, de santidad y de verdad.
Miremos ahora a los como 120 que habían en ese lugar. ¿Cómo estaban? Sabemos que estaban orando (orar es una forma de morir, de negarse a uno mismo), que habían abandonado sus trabajos, sus amigos, incluso la forma de vida que llevaban antes de ser llamados por Jesús, también la abandonaron. Pregunto otra vez ¿Cómo estaban? La respuesta es obvia: "muertos".

Y fue sobre esos 120 cuerpos muertos (en sentido figurado) que descendió el poder de Dios. Ellos representaban lo que Pablo dice en Romanos 12 que nosotros debemos ser: "sacrificios vivos".

Jesús claramente indicó que para ser sus discípulos debiamos negarnos a nosotros mismos y tomar la cruz. ¿Para qué? "Para morir".

Así que recuerda, la próxima vez que vayas al Señor a demandar el tan deseado ( y urgentemente necesario) avivamiento preguntate si tu estás muriendo como se debe.

La carne quiere cualquier cosa menos morir. ¿Estaremos dispuestos a pagar el precio?

Siempre deseando llevarnos a Él, fraternalmente
Pastor Gabriel

viernes, 15 de agosto de 2008

Jesús purificó el templo ¿y nosotros qué?


Juan 2:13 al 17 nos da una prueba más de lo importante que es "tener celo" por las cosas de Dios.

Si hay algo en estos versículos que me estremece es que hasta el día en que Jesús entró en este templo y en un acto de "santa ira" (la ira de Dios es TAN SANTA como su amor), volcó mesas , esparció las monedas de los cambistas, azotó cuerdas y ojo con esto: "echó fuera del templo a todos". ¿Nos hemos detenido lo suficiente a meditar en lo que hizo el Señor?


Hasta el minuto en que Él llevó a cabo este acto de purficación o limpieza, la Biblia NO señala que hubiera ni una sola persona que estuviera descontenta o incomoda por lo que pasaba cotidianamente en el templo, el cual el Señor había dicho (y les recordó en ese minuto), debía ser CASA DE ORACIÓN y había sido convertido en cueva de ladrones. ¿Fuertes palabras, no?


Estoy seguro que muchos defensores de la mal entendida consigna "Dios es amor", (porque ciertamente lo es y en esta enseñanza hay una gran prueba de ello), hoy día acusarán al Señor de "falta de amor o dureza" (como se hace hoy con aquellos que predican la verdad sin adornos) o dirán que tal vez Jesús no había tenido un buen dìa y se desquitó con la gente, pero la Palabra de Dios que NO MIENTE, es clara en afirmar los motivos que tuvo el Señor. Aunque Él no le dió explicaciones a nadie por su conducta, sus discípulos recibieron luz al respecto. El verso 17 dice: "entonces se acordaron sus discípulos que está escrito: el CELO de tu casa me consume".


Queridos hermanos y consiervos en Cristo, Jesús a causa de Su celo por las cosas de Dios, se echó a todo el mundo encima. Los religiosos hallaron en este acto de santidad más motivos para matarle, pero los verdaderamente suyos aprendieron una lección que posteriormente pondrían en práctica: "se debe ser celoso en la obra de Dios".


Celoso en la manera en que llevamos a cabo el servicio, celoso en qué se canta, celoso en quién canta, celoso en cómo sostenemos la obra, celoso en qué se predica y en quién predica.

No basta con tener gente liderando diferentes ministerios es necesario contar con la gente idonea.


El celo consumía al Señor, porque Él amaba a la gente, amaba la obra y tenía un verdadero compromiso con ella. Por todo lo anterior, El purificó y, nosotros, qué?

lunes, 4 de agosto de 2008

¿Tenemos celo por las cosas de Dios?


El Señor hablando a la iglesia en Laodicea dijo en Apocalipsis 3:19..." se pues CELOSO, y arrepiéntete".

Como era costumbre en su ministerio, tocó directamente y sin rodeos el problema que veía en la iglesia Laodicense: la falta de celo por las cosas de Dios y su necesidad de arrepentimiento.


Laodicea significa los derechos del pueblo. Jesús veía una iglesia que estaba tan llena de si misma (del hombre) al punto que había despojado al Señor de Su Lugar dentro de la asamblea y se encontraba a esta altura del partido llamando desde afuera (¿no te parece terrible?), dándole la oportunidad a quien estuviese dispuesto a abrir para poder tener comunión e intimidad con esa persona (v.20: "cenaré con él").


Esta falta de celo está directamente relacionada con la "tibieza" de esta iglesia expuesta en el verso 16. Cuando la temperatura espiritual alcanza un grado que nos hace sentir "cómodos", dejamos de buscar, nos detenemos creyendo que hemos conseguido lo que buscábamos. Esta iglesia se "jactaba de cosas terrenales" (verso 17). ¿No pasa lo mismo hoy día? ¿No hay gente jactándose de lo grande que son sus templos o de lo multitudinarias que son sus reuniones o de las poderosas manifestaciones (cuidado otra vez, porque las manifestaciones no son la vara para medir la espiritualidad de alguien, ver Mateo 7:22-23)) que tienen lugar en sus reuniones y otras cosas terrenales que no representan EN SI un fruto espiritual?


Me temo que hemos alcanzado este punto en el cual Jesús vió sumida a la iglesia, encandilada y embriagada de las cosas del mundo pero absolutamente desprovista de lo verdaderamente espiritual. De hecho Él mismo le "aconseja" sobre lo que necesita hacer para ser en verdad rica, vestirse y ver (v.18) y dejar de estar pobre, desnudo y ciego.


¡¡Qué gran contraste entre lo que el hombre cree correcto y lo que Dios sabe que es correcto!!


En su afan por conseguir éxito las iglesias de hoy han cedido a cuestiones terrenales (¿Dónde está el celo?), a prácticas que no son bíblicas, y si bien esto les ha traido resultados, no quiere decir que sean cosas que apruebe el Señor. No olvidemos la Torre de Babel, que habla de lo que "la fuerza del hombre" puede hacer para hacerse un nombre, si bien lo único que en verdad tenía era lo que su propìo nombre indica "CONFUSIÓN"(babel).

Hoy la fuerza del hombre vende cosas dentro de la iglesia, hace rifas, acepta modas y estilos mundanos con tal de que los que están "no se vayan al mundo y que otros puedan entrar".

Y claro, muchos entran porque ya no hay un llamado a abandonar el mundo, sino que se ha traido el mundo a la iglesia para hacerles más sencilla la entrada a todas las personas. Esto no lo aprendimos del Señor quien habiendo amado al joven rico, le dejó ir porque este amaba más el mundo (sus riquezas)


Dios expulsó a Adán y Eva del huerto porque se volvieron extraños al Creador, consumió a Core porque ofreció fuego extraño, hizo caer muerto a Uza porque tocó el arca y su mano fue extraña para el Señor y a pesar de todo lo anterior, todavía hoy hay gente que piensa que puede ofrecer "sacrificios extraños" (prácticas no bíblicas) al Señor y no llevar castigo por ello.


El Señor fue claro: se CELOSO y arrepiéntete. ¿De qué? De tu falta de celo.

Estoy seguro que hay mucho de lo cual Dios está esperando que nos arrepintamos.

¿Qué piensas tú?


Seguiremos después, fraternalmente

Pastor Gabriel Torres.

jueves, 31 de julio de 2008

¿Cuánto celo hay en nosotros?


Qué profundas palabras de Nuestro Señor: "Yo reprendo y castigo a todos los que amo; se, pues, CELOSO, y arrepiéntete" (Apocalipsis 3:19)


¿Podemos decir que hay celo por las cosas de Dios en nosotros? ¿Existe verdadera pasión en nuestra alma por mantener puro el evangelio?

Jesucristo no solo dijo que "la reprensión y el castigo" eran parte de Su Amor, sino que tambíen mencionó la "falta de celo", que a esa altura del partido, Él ya podía ver en la iglesia.


Este versículo me lleva a pensar en lo que se predica en las congregaciones hoy por hoy: mensajes que animan al éxito, a la autorealización donde el Señor, más que Señor se transforma en un "viejo pascuero", que trae las cosas que nosotros deseamos tener.


A juzgar por lo que se escucha y ve en la llamada tv cristiana, temas como la cruz, la negación de uno mismo, el espíritu sacrificial, la santidad de vida, y otros, son temas olvidados (o quizás puestos a un lado a propósito?). Tengo la fuerte impresión de que las grandes iglesias están más dedicadas a satisfacer los deseos de los hombres antes que las demandas del Señor, que por cierto, no han cambiado.


Para tener un "verdadero avivamiento" se necesitará volver a la predicación apostólica. Y ya que está tan de moda el apostolado en nuestros dias, yo les exijo en el nombre de Jesucristo:

Que prediquen el mensaje que predicaron los apóstoles del Señor (arrepentimiento, doctrina apostólica). Que estén dispuestos a pagar el precio que pagaron los apostóles del Señor (persecución). Que estén dispuestos a vivir como vivieron los apóstoles del Señor (sencillez).


La biblia dice "traían el precio de lo vendido y lo ponían a los pies de los apóstoles y se repartía a cada uno según su necesidad". (Hechos 4:34-35)


Cuando Pedro y Juan fueron requeridos de una limosna el APOSTOL Pedro dijo "NO TENGO plata ni oro". ¿Cómo, no tenía dinero o estaba mintiendo para no dar? Sabemos que no estaba mintiendo, por tanto, NO TENIA DINERO, pero atiende a lo que dijo: "lo que TENGO te doy: levántate y anda". ¡¡Gloria a Dios!!

Pedro le dió algo más que un mensaje de ánimo o autorrealización, le dio (en el nombre de Jesucristo) una vida totalmente nueva.

Lo triste es que los apóstoles modernos se quedan con los recursos y dejan a la gente en la misma condición de necesidad espiritual. Porque dinero es lo único que tienen a diferencia de Pedro que tenía la vida y poder de Cristo morando abundantemente en él y por eso la podía compartir.


Exijo a los que dicen ser apóstoles (y no lo son, ver Apocalipsis 22) que demuestren la veracidad de su ministerio mediante sus frutos. ¡Cuidado! Tener un gran templo no es un fruto espiritual


Muchos de los llamados apóstoles de hoy son gente que vive cada vez más acomodada en términos económicos, porque los recursos se quedan a los pies de los apóstoles modernos y no van a parar a aquellos que tienen necesidad.


"Falsos profetas de la comodidad" que lejos de urgir al pueblo a una verdadera conversión y compromiso con Cristo, les adulan con palabras infladas, para hacerles sentir cómodos y les presionan usando la bilbia para que la gente haga un compromiso con ellos y así no perder el apoyo económico.

¿Qué van a hacer cuando muchos de aquellos a quienes les han asegurado la entrada al cielo, se queden fuera por no haberles entregado el mensaje verdadero?


Quiero recordarles (por amor a ustedes mismos), que fue el Señor quien dijo que la reprensión y el castigo eran parte del amor verdadero. Uno corrige a quien ama, precisamente porque lo ama, pero al asalariado no le importan las ovejas, sino lo que recibe de las ovejas.

Prefiero ser catalogado de duro y saber que estoy siguiendo los pasos de Cristo (a ÉL le dijeron lo mismo) antes que pecar de blando o permisivo y llevar a la gente por un camino equivocado. Después de todo un hijo tarde o temprano agradecerá no a los padres permisivos que les dejaron hacer lo que querian sino a los que en verdad les enseñaron lo necesario para la vida.


El siguiente punto es el "celo", pero lo dejaré para la próxima.

¡¡Dios unge nuestros ojos con colirio para que veamos!!

Pastor Gabriel.

09 8 2535073

martes, 8 de julio de 2008

¡¡Oh, si rompieses los cielos y descendieras...!! (Isaias 64:1)

Este clamor de Isaias identifica a una minoría (que gracias a Dios es mayor de lo que alguna vez pensé), que está harta de tolerar lo que vergonzosamente hoy llamamos la obra de Dios y que SABE que si Dios realmente estuviera en medio de la iglesia como algunos "grandes líderes" dicen que está, a Su Presencia se escurrirían los montes.

Hoy el único que parece haberse escurrido de las iglesias es Dios Mismo, y cómo no, con toda la mundanalidad que se permite en ellas: Partiendo por un liderazgo que lo ha despojado de Su Señorío, que se siente más sabio que Dios aceptando lo que Dios desechó, llamando a lo bueno malo y viceversa, que en su falta de poder espiritual verdadero recurre a toda clase de trucos para atraer gente a las congregaciones, que ha instituido el "aceptar a Cristo" como la gran doctrina que asegura salvación (aunque Cristo mismo nunca le pidió a nadie que lo "aceptara" para ser salvo), gente que por lo demás aparte de haber "confesado a Cristo", no se ha convertido de sus malos caminos.

Ni hablar de lo que pasa dentro de las reuniones, aquello a lo que muchos llaman "un culto de Gloria", no es más que muchos saltos, unos pocos gritos, un mensaje dirigido a la autoexaltación y al éxito (en términos terrenales).
Usted ya sabe: que sea próspero, que tenga dinero, porque después de algunos cientos de años (unos dos mil más o menos) los nuevos "apóstoles" han descubierto que el plan de Dios es que seamos ricos. Lástima que los apóstoles del Señor no tuvieran la capacidad de revelación que tienen los "apóstoles modernos". ¡¡Qué ridiculez y ostentación pensar que hoy pueden tener más luz que la que ellos tuvieron después de haber visto "con sus propios ojos la luz, que es Cristo".
"Haz probado a los que dicen ser apóstoles y no lo son" (Apocalipsis 2:2)

Señor, me uno al clamor de Isaias: ¡¡Oh si rompieses los cielos y descendieras (otra vez), para que hicieres notorio Tu (Santo) Nombre a tus enemigos!! que hoy están dentro de la iglesia ocupando púlpitos, lobos vestidos de ovejas, que niegan tu Santa Palabra, que toleran la mundanalidad, que se han apartado de tí, y que han convertido tu casa de oración en cuevas de ladrones.

Haz que las naciones (y la iglesia) tiemblen a Tu Presencia. ¡¡Eso es avivamiento!!

domingo, 6 de julio de 2008

¿Siervos o Señores de la Iglesia?

¿Te ha pasado que alguna vez diste con algo en la Palabra de Dios que nunca antes habías notado era tan importante para el Señor, y por ende, para tí?
Hay un mensaje importantísmo en el libro de Apocalipsis. Se encuentra en el capítulo 2, versículos 5 y 16, en los cuales el mismo Señor menciona algo que no aparece en ninguna otra parte de las escrituras: "las obras y la doctrina de los nicolaítas". Jesucristo mencionó dos veces que el aborrecía tanto las obras como la doctrina.
En ninguna otra parte Jesús dice aborrecer algo o alguien como en este caso específico. Sabemos que él aborrece lo malo, pero con nada fue tan específico como con esto.
¿Quiénes son los nicolaítas? Es una palabra compuesta que viene del griego nike, niko (conquistador, vencedor, que controla o prevalece) y laos (gente), así nicolaita significa "que conquista la gente".
El Señor manifestó su molestia con los líderes religiosos de su época. Le molestaba la falta de amor que mostraban por las personas (ovejas) y el exacerbado interés que tenían por ser vistos y reconocidos por la gente.
El Señor claramente manifestó que en el reino de los cielos el mayor es el que sirve y que él estaba como uno que vino a servir. Nos dejó ejemplo para que sigamos sus pisadas.
Los apostoles, Pedro y Pablo nos recalcaron que la autoridad recibida era para edificar la iglesia y no para enseñorearnos de ella. Que debíamos apacenta la grey, y no esperar que la grey nos apaciente a nosotros.

La doctrina nicolaita es una doctrina de control sobre la congregación, donde hay superiores (líderes) e inferiores (grey). Esto no acompaña el sentir apostólico y mucho menos el del Señor, quien en efecto no caminaba sobre las ovejas sino entre las ovejas.

Me temo que no le hemos puesto suficiente atención a las palabras del Señor y que muchas veces, sin darnos cuenta, hemos extralimitado nuestra autoridad cayendo en el autoritarismo y perdiendo el norte: somos colaboradores en la obra y no los dueños de ella.

Veo la iglesia primitiva con un liderazgo genuino, del Espíritu. Hombres con discernimiento y visión de Dios (¡¡dos cosas que por Dios que hacen falta!!) y que tenian muy claro lo que creían. lo que se esperaba de ellos y hacia donde debían ir

Líderes verdaderos que no obligaban, ni usaban trucos ni amenazas para retener a los creyentes. Simplemente poseían carácter, carisma, un norte claro y definido que hacía que otros se sintieran identificados y lo suficientemente inspirados como para seguirles aun a costo de sus propias vidas.

Ellos confiaron en Dios, usaron los métodos y las armas de Dios, no hubo intimidación ni abuso de autoridad para lograr que los seguidores entendieran la visión celestial. Fueron siervos, igual que Cristo: ¿Igual que nosotros?

martes, 24 de junio de 2008

EL MODELO PARENTAL II (Radio Armonía)

Continuando con la idea del modelo parental, una de las cosas que necesitamos para realizar un buen trabajo es lo que se denomina "feedback" o "retroalimentación". Este permite obtener informacón acerca de cómo perciben (en este caso) nuestros hijos el trabajo que hacemos como padres y por tanto nos facilitará el hacer los cambios pertinentes para mejorar nuestra labor.
No se trata de ser padres "a la pinta de ellos", pero si de saber si estamos respondiendo a sus necesidades reales. Mucha veces creemos que hacemos las osas bien y cuando preguntamos a otros, nos enteramos de que no era tan así como creíamos. Recuerda que somos llamados no sólo a proveerles las cosas que necesitan, sino también el ambiente emocional y espiritual adecuado para desarrollarse bien.

Las bajas notas de nuestros hijos a veces son el producto de su flojera o falta de hábitos de estudios (la responsabilidad de crearles este hábito es nuestra), pero en muchas ocasiones tiene que ver con una desmotivación intrínseca producto de un ambiente familiar tenso, lleno de discusiones, pleitos y cosas semejantes, que no son de ayuda para ningún estudiante.

Es super necesario entonces que busquemos propiciarles un grato ambiente familiar. Que los niños especialmente, no se vean en medio de discusiones o problématicas de dinero u otro tipo.

Este tipo de recuerdos es difícil de olvidar, incluso cuando uno crece y aunque las condiciones de vida cambien, normalmente las imágenes permanecen guardadas en las mentes de las personas.

Por otro lado, no olvidemos que no se puede dar lo que no se tiene, y a veces nuestro rol parental es deficiente y limitado porque no contamos con las herramientas para hacer un mejor trabajo.

Las personas organizamos nuestras vidas en alguna de estas tres formas, vivimos como pensamos, como queremos o como debemos.

El vivir como pienso tiene que ver con la escuela que recibí básicamente en casa, la tradición. "Mis padres me criaron así y por lo tanto yo lo hago de la misma forma". El problema con este modelo es que reproducimos lo bueno y lo malo de nuestros padres y en muchas ocasiones perfeccionamos los errores.

Al vivir como queremos existe el riesgo de que el modelo que elijamos seguir nos de más problemas que soluciones. Las nuevas tendencias sociales dejan fuera a Dios y esa ha sido, es y seguirá siendo la gran tragedia de la humanidad. Este modelo habla de un espíritu independiente, y ya sabemos lo que pasó a Adán y Eva cuando escogieron actuar independientes de la voluntad de Dios.

Finalmente está el vivir como debemos y ¿adónde más que en la Palabra de Dios podemos encontrar la sabiduría que se necesita para hacer las cosas correctamente? Sin embargo, vivir como debemos no es nada fácil, porque los principios de Dios chocan con los principios del mundo post moderno.

Nuestro liderazgo como padres debe provocar la ADMIRACIÓN y el RESPETO de nuestros hijos. Ellos siempre están buscando modelos a seguir y Dios desea que nosotros seamos esos modelos. Muchas veces somos cuadrados y legalistas con ellos (lo contrario a esto no es ser libertinos) y nuestro rol parental se ve limitado a un par de "haz esto o no hagas aquello", provocando una distancia entre nuestros hijos y nosotros. Es como cuando tu oyes la mitad del evangelio y te creas una impresión inexacta de lo que Dios es en verdad.

Para algunos Dios es sólo amor (tanto amor que convierten al amor de Dios en un dios, ¡cuidado!) y para otros Dios es sólo justicia y juicio (está esperando que te equivoques para deshacerse de tí). Lo cierto es que Dios "nos ama con tal amor que dió a su hijo unigénito para que todo aquel que en Él crea no se pierda, pero del mismo modo, no dará por inocente a un culpable". Y esto crea el equilibrio perfecto.

Nuestros hijos deben ver esta clase de equilibrio en nosotros, un liderazgo sabio, ejemplar, sencillo pero firme y claro a al vez, que tiene objetivos bien definidos. Eso les gusta a los hijos, ver que sabemos hacia donde vamos y hacia donde les conviene ir. Seguramente esta clase de liderazgo les traerá de vuelta a una relación de admiración y respeto con nosotros como padres.

Hay padres que buscando ser amigos de sus hijos, "han fallado en marcar los límites de esa amistad". Jesús dijo "seréis mis amigos, si hacéis lo que os mando", entonces esa amistad está condicionada por una respuesta adecuada a las demandas del Señor. Esto es algo digno de imitar. Si mi hijo responde bien, responsablemente en lo que le encomiendo, entonces el nivel de confianza crece y con ello también crecerán los privilegios. Pero hoy día muchos padres ofrecen amistad sin compromiso, dan recompensa sin mediar un trabajo. Recordemos que "lo que nada cuesta, nada vale".
Podemos y debemos ser amigos de nuestros hijos pero ellos, aunque no lo parezca (o no lo quieran reconocer) siguen necesitando nuestra guianza y dirección.
Continuará...

Que Dios te bendiga,
Pastor Gabriel Torres
Licenciado en Educación,
Profesor de Inglés / Intérprete de Ministros

Para invitaciones comuníquese a los fonos 3170945 / 8 2535073

jueves, 5 de junio de 2008

El Modelo Parental I (Nunca es Tarde de Radio Armonía)

Proverbios 30:11 "Hay generación que maldice a su padre y a su madre no bendice"

Triste declaración pero describe con bastante exactitud la actitud que tienen los hijos hacia sus padres en la actualidad.
En esta ocasión me referiré al modelo parental, el cual es un tema demasiado relevante como para dejarlo pasar. Aunque lamentablemente, hoy por hoy es un tema olvidado. Sin embargo, nuestra responsabilidad como padres no puede (ni debe) ser relegada a ninguna institución, bien sea el colegio o jardín infantil u otro, ni a persona alguna, asesoras del hogar, profesores, etcétera.
No es correcto, primero, porque ninguno podrá desempeñar este rol mejor que nosotros y en segundo lugar, simplemente porque son nuestros hijos y es nuestro deber, después de haberlos traido al mundo, encaminarlos por el.

El Modelo Parental tiene que ver con nuestra capacidad y habilidad de ser ejemplos deseables a seguir por parte de nuestros hijos. Está absolutamente claro que nuestros hijos siempre están en busca de modelos. Frecuentemente encuentran estos model0s en algún personaje de la televisión o de alguna banda musical. El riesgo con esto es que esos modelos a menudo no son lo que en verdad conviene a nuestros hijos.

Dios desea que el principal modelo para ellos seamos nosotros mismos. En efecto, nosotros tenemos la gran posiblidad de formar o deformar la personalidad de nuestros hijos mediante nuestro propio ejemplo. Por esto es que no podemos tomar a la ligera nuestro rol como modelos para ellos, porque las conductas que ven en nosotros son las que ellos entienden como adecuadas, o al menos, permitidas: "si mi papá (mamá) lo hace, entonces, yo también lo puedo hacer".
El Apóstol Pablo decía "sed imitadores de mi, como yo de Cristo ¿Somos un modelo que ellos puedan imitar? ¿Es mi manera de vivir, el parámetro adecuado para la vida de mi hijo(a)?

La mejor enseñanza que nuestro hijos reciben no se transmite mediante instrucciones verbales sino mediante nuestro propio ejemplo. Los hijos no aprenden tanto cuando les decimos que hagan algo, como cuando nos ven a nosotros mismos hacerlo.
¡¡Si quieres que tus hijos oren, no basta que los mandes, ellos deben verte orar!!

Esto se aplica a cualquier otra conducta que deseemos. Además, hacerlo nosotros primero nos faculta para poder requerirlo.
Ellos desean ver en nosotros las cosas que les exigimos. Si exijo orden, debo ser ordenado, si exijo respeto, debo ser respetuoso, si exijo consideración, debo ser considerado, si exijo honestidad, debo ser honesto y así sucesivamente.

Muchas veces "provocamos a ira a nuestros hijos" (ver efesios 6:4), exigiendo de ellos cosas que nosotros mismos no hacemos. Ellos al ver esta actitud nos tildan de injustos, de hipócritas y perdemos autoridad frente a ellos. ¿Cuántas veces somos nosotros la piedra de tropiezo que les impide acercarse al Señor? Nos ven diciendo una cosa y haciendo otra.
Fallamos al exigirles algo que nosotros mismos no estamos dispuestos a dar.
La autoridad no es lo que impongo sobre alguien (eso es autoritarismo), sino lo que recibo de alguien como reconocimiento a mi actuar.

Nuestros hijos tienen la necesidad natural de ser liderados, por eso siempre están buscando algún modelo a seguir. ¿Por qué tener que buscarlo fuera de casa si puede hallarlo dentro, en nosotros? Pero a veces no les dejamos alternativa. Sobretodo los jóvenes, se sienten tan decepcionados de nuestro pobre proceder como padres (no olvidemos que ellos son muy exigentes, pero el Señor también lo es), que prefieren imitar modelos foraneos, los que en su mayoría no representan lo que nosotros desearíamos para ellos. Al consultarles por esto tus hijos dirán: "Quizá este modelo (cantante, actor u otro) no sea el mejor, pero al menos es genuino"

Francamente, a veces los hijos se rebelan porque nosotros les damos motivos. Esa es la razón por la que el Señor nos manda "no provocarlos a ira, sino criarlos en disciplina (y amonestación) del Señor)". La rebelión en ellos, muchas veces es una manifiestación de descontento.

Por tanto, es preciso recuperar nuestra capacidad de liderazgo en casa y sobre nuestros hijos. Ellos deben vernos como algo más que la persona que da órdenes o compra las cosas que se necesitan. Nuestro rol es mucho mayor que esto. Somos llamados a guiar y dirigir este barco llamado familia. Necesitamos detener nuestro rápido vivir (¿o sobrevivir?) para analizar y reflexionar sobre qué clase de vida estamos llevando y desde luego, si es necesario, replantear nuestro rol como líderes de nuestro hogar. Recordemos que un verdadero líder no obliga. Un líder verdadero inspira, motiva y provoca la admiración y el respeto de las personas.
Nuestros hijos han dejado de respetarnos y admirarnos porque nosotros hemos dejado de ser verdaderos líderes para ellos.
Nunca he sabido (mucho menos oído) de alguien que maldiga a quien respeta y admira. ¿Te das cuenta dónde radica el verdadero problema?
Podemos hacer algo por cambiar esta situación y debemos partir...¡¡por casa!!
Espero que estas lineas hayan sido de bendición. Continuará...

Pastor Gabriel Torres A,
Licenciado en Educación, Intérprete de Ministros del Evangelio
Por invitaciones contactar al 3170945 o al celular 09 8 2535073

martes, 3 de junio de 2008

¿A qué te estás dedicando?

Para la vida del mundo actual la palabra clave parece ser "éxito". O eres exitoso en lo que haces o no eres nadie. Pero no olvidemos queridos hermanos en el Señor, que nosotros no tenemos un llamado al éxito en términos humanos o terrenos, sino a la "fidelidad". Mucho de lo que los hombres llaman éxito, a los ojos del Señor no es más que paja, heno y hojarasca.
Es bien cierto que "los caminos del Señor son más altos que los nuestros" y ciertamente lo son también los parámetros con los cuales Él mide nuestros resultados. Para muchos Noé es considerado un fracaso como predicador, pero a los ojos del Señor, el fue exitoso, aunque no se salvaron más que ocho personas en el arca.
Nuestro real éxito consiste en ser fieles a Dios en el llamado que hayamos recibido de Él en cualquier circunstancia. Más allá del número de hermanos que se congregan en nuestros templos o la cantidad de obras que podamos abrir, o los equipos de vanguardia que podamos tener o cualquier otro logro, seremos realmente exitosos el día que habiendo entrado en el Reino de nuestro Padre, Él pueda decirnos: "bien hecho, buen siervo y fiel" ¡¡Esos son los que entrarán en el gozo de su Señor!!
Ser exitosos es poder llegar a decir (cualquiera sea el llamado que Dios nos haya hecho) como nuestro Señor y Maestro: "Consumado es". ¿Puede haber un gozo mayor?

sábado, 24 de mayo de 2008

Nuevos Tiempos: Orar contigo otra vez

Nuevos Tiempos: Orar contigo otra vez
Les invito a ver un video que de seguro les hará pensar: ¡¡Gracias Señor por todas esas madres que han sido baluarte en nuestra salvación!!

lunes, 5 de mayo de 2008

¿Qué estamos haciendo por los que se pierden ?






El contador está marcando el número de personas que habrá muerto en el mundo desde el momento en que llegaste a esta página. Anuncia que ¡¡150.000 personas mueren cada día y muchas de ellas van camino a la eterna perdición!!
¿Qué estamos haciendo por los que mueren sin Cristo?
¿De que manera estamos aportando para que otros reciban el mensaje de Salvación?
¡¡Dios nos hará responsables!!. Él nos comisionó para "ir y hacer discípulos a todas las naciones". Pero para ir se requiere algo más que sólo el deseo. Se necesitan el llamado, la capacitación, la llenura del Espíritu Santo y los recursos para realizar la tarea.
Nehemías recibió la carga para reconstruir los muros caídos de Jerusalén, y también el permiso y los recursos necesarios para llevar a cabo la tarea. No sólo lloró por el estado de sus hermanos, no sólo oró por ellos, no sólo hizo ayuno, además, se levantó para ir y hacer "algo concreto" para cambiar la situación del pueblo.
Muchas personas no están dispuestas a ir, pero ¿estarán al menos dispuestas a proveer para que otros vayan? A veces pensamos en misiones a nivel internacional y eso está muy bien, pero dentro de tu propio país, ¿cuántas personas no conocen al Salvador Jesucristo? Jesús habló a sus discípulos diciendo que le serían testigos partiendo desde Jerusalén, es decir, desde su propia tierra, avanzando luego hacia Judea, Samaria y finalmente hasta lo último de la tierra". Creo que Chile es un largo país que ha escuchado mucho acerca de Dios, pero que necesita escuchar a Dios, mediante el mensaje verdadero -no diluido- del evangelio de Jesucristo.
En el pueblo de Dios hay distintas personas que suplen distintas necesidades: unos tienen el llamado a ser predicadores, otros a interceder, otros a servir, otros a dar, etcétera. ¿En cuál de esos grupos estás tú?
No nos conformemos hermanos. Recordemos que "lo bueno es enemigo de lo mejor" y que después de haber hecho algo bueno para Dios, todavía hay mucho más que podemos seguir haciendo. Después de todo, a los verdaderos hijos de Dios, a los que se han alejado del pecado y viven vidas en rectitud y santidad, Dios no los va a juzgar por lo malo que hayan hecho, sino "por lo bueno que no estuvieron dispuestos a hacer".
"Y al que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado" (Santiago 4:17)

Canal 23. Un moderno "salmo" tomado de la "Nueva Perversión No Cristiana Internacional "

1.El televisor es mi pastor; no deseo nada más

2.Sobre mi delicado sofá me hará descansar; de la Palabra del Señor me alejará

3.Destruirá mi alma;
Me guiará por sendas de sexo y violencia por amor de los patrocinadores

4.Aunque ande en valle de sombra y de muerte, me deleitaré en la maldad,
porque la sangre y el sexo me emocionan
El control remoto y el cable me infundirán aliento

5.Aderezan destructivos programas delante de mí en presencia de mis hijos
Ungen mi cabeza con humanismo, mi codicia está rebosando

6.Ciertamente la flojera y la ignorancia
seguirán a mi familia todos los días de nuestra vida,
y en la sala donde está el televisor moraré por largos días

David decía "no pondrè delante de mis ojos cosa injusta" (Salmo 101:3a)

¿Estamos sinceramente buscando la santidad, temiendo a Dios y apartándonos del mal?
¿Puede el Espíritu Santo simplemente "llenar con Su Presencia y Poder" a alguien que ha estado horas viendo correr sangre, deleitándose con escenas donde otros tienen sexo, maldicen cada dos palabras y dando culto a lo oscuro viendo películas demoníacas?

La Biblia dice que deberíamos estar clamando y rogando a Dios que avive a su pueblo. Yo quiero que cuando Mi Señor venga por mí , me encuentre involucrado en sus negocios, haciendo Su Voluntad. Dios te Bendiga,
Pastor Gabriel

martes, 29 de abril de 2008

¿Qué cautiva tu corazón?

¡Hay tantas cosas en la actualidad que compiten por el corazón del hombre!
El deseo por las cosas que se ofrecen en los medios de comunicación. El poseer, el llegar a ser alguien en la vida, el conseguir esas cosas "bonitas" que el dinero puede comprar. Incluso personas que tratan de meterse en tu corazón y ser todo para tí. Pero ¿Dónde debe estar nuestro corazón? Jesús dijo que "donde estuviera nuestro tesoro ahí estaría también nuestro corazón". ¿Te has preguntado últimamente dónde está el tuyo?, ¿Cuál es tu tesoro? ¿A quién le pertenece tu corazón en realidad?
He aprendido en la Biblia que Dios es un Dios celoso. Que me anhela celosamente por medio del Espíritu Santo, y que me hace la siguiente petición: "Dame, hijo mío, tú corazón y miren tus ojos por mis caminos" (Proverbios 23:26)
¿Qué vas a responder? Si Él te llamara ahora, ¿Con quién estaría tu corazón?
Si tuviera que enfrentarlo cara a cara a Él, que no puede ser burlado, ¿qué le responderías?
Es una pregunta que vale la pena responder honestamente, ¿sabe por qué? Porque la Biblia y todo lo que ocurre en el mundo me dice que el rapto de la iglesia es inminente y que el Señor volverá por aquellos que "aman su venida". Si tu corazón está en este mundo (como el de la mujer de Lot, que miró atrás porque allí estaba su corazón) seguramente no podrás emprender el vuelo de aquellos que lo aman a Él más que a nada, a quienes ha prometido arrebatar.

Cuidado mis hermanos, escucho tantas predicaciones y tantas apelan a que tengas una mejor imagen de ti mismo, a que Dios te quiere dar esto o aquello. Pero yo si sé que a los suyos Dios les está instando a santificarse, a volverse a la oración, a arreglar esas cosas pendientes en sus vidas para que nada les impida alzar el vuelo al oír esa bendita trompeta.

Te invito a hacer un alto y meditar, porque aunque no te conozco, sé que Mi Padre es también el tuyo y te ha guiado a leer este blog para hacerte pensar: ¿Dónde está tú corazón?

viernes, 25 de abril de 2008

MEJORANDO LA COMUNICACIÓN CON NUESTROS HIJOS (3a parte)

3.- SABER HABLAR. Todos hablamos siempre, y a veces, muchas veces, hablamos más de la cuenta. Al momento de hablar es necesario considerar algunos aspectos si hemos de comunicarnos efectivamente.

• SABER MANEJAR NUESTRO TONO DE VOZ: amable, firme, etc, según la ocasión lo requiera. Jesús siempre hablaba con autoridad pero no usaba el mismo tono con todos. A la mujer samaritana le habló con dulzura, en tanto que a los cambistas en el templo los reprendió con dureza.

• NO OFRECER CONSEJOS CADA VEZ QUE NUESTROS HIJOS NOS CUENTAN ALGO. "El síndrome del pastor". A menudo terminamos dando nuestro parecer sobre tal o cual situación que ellos nos comparten, cuando en realidad ellos sólo quieren ser oídos.

• NO CONVERTIR CADA CONVERSACIÓN EN UN REGAÑO. Aleja a los hijos, los limita a confiar y abrirse. Se sentirán menos deseosos de acercarse a nosotros y correrán hacia sus amigos quienes siempre les apoyan o celebran sus anécdotas e historias y nunca los censuran en nada.

• CUIDADO CON CIERTAS PALABRAS, tales como: “siempre”, “nunca”. Es mejor intentar: “siento”, “me parece”. De pronto sonamos muy absolutistas y sabelotodos.
¿Quién quiere hablar con alguien que "se las sabe todas"? ¿Qué opción tenemos frente a alguien así?

• LA MEJOR MANERA DE ACABAR UN DIÁLOGO ES USANDO PALABRAS HIRIENTES. Cuidado: cuando estamos heridos, herimos. A todo nivel esto es cierto. Moisés se airó con el pueblo. En vez de hablar a la roca, la golpeó, (eso hacemos con nuestra boca, a veces "golpeamos" a las personas con nuestras palabras) y esto le costó no entrar en la tierra prometida.
Queremos ganar a nuestros hijos, recuperar el espacio que el mundo nos ha quitado con ellos y para esto deberemos cuidarnos de no herirles gratuitamente ni en cada ocasión que tenemos junto a ellos. A veces vale la pena esperar a que las cosas "decanten" un poco y "el polvo en suspensión baje" antes de querer limpiar o tratar algún asunto.


• CRITICA EL COMPORTAMIENTO, NO AL HIJO. A menudo generalizamos y ponemos todo en el mismo plato, haciendo sentir a nuestros hijos que somos injustos. Esto no es bueno, ellos saben que Dios Padre es JUSTO.

De todo corazón espero que estas ideas sean de provecho para la hermandad que desea mejorar sus relaciones con sus hijos y no sabe cómo hacerlo.

Sigue el programa los días miércoles de 16 a 17 horas en "Nunca es Tarde" de Armonía 106.3 fm. Nuestro próximo tema es "La Disciplina: ¿qué es, para qué sirve?"

Por clases de Inglés o invitaciones para talleres o predicaciones, puedes contactarme al (02)3170945, celular (09)7 4483232 o al mail del blog.

Pastor Gabriel Torres A.
¡¡Bendiciones!!

viernes, 18 de abril de 2008

Ministerio de Ray Comfort

Aprende técnicas para un verdaderamente efectivo evangelismo

jueves, 10 de abril de 2008

MEJORANDO LA COMUNICACIÓN CON NUESTROS HIJOS (2a parte)




Si deseamos tener un acercamiento con nuestros hijos, hay 3 aspectos que debemos considerar:
1.- Saber Escuchar
2.- Saber Observar
3.- Saber Hablar

1.- Saber Escuchar.
Esto va primero.porque escuchar es fundamental. Tenemos dos orejas y una sola boca. esto nos está tratando de decir algo que no debemos pasar por alto (ver Santiago 1:19)

2.- Saber Observar.
Consideremos la importancia de la comunicación NO VERBAL
Las expresiones faciales, las expresiones corporales y gestos.

Estas cosas nos pueden acercar o alejar de ellos. Si deseamos tener cercanía con ellos debemos:
Ser demostrativos con ellos
Mostrar interés y respeto por lo que nos cuentan, sorpresa y admiración cuando la situación lo requiera.

jueves, 3 de abril de 2008

¿Estamos realmente camino a un avivamiento espiritual? ¡¡Tienes que leerlo!!

Es bien fácil ser llevado por la corriente de este siglo.
¡¡Es tan trágico pensar que la luz de Dios habite en nosotros y que nuestros vecinos o compañeros de trabajo al mirarnos, sólo vean una persona más!!
Creo que la iglesia primitiva (que es nuestro patrón, ¿no?), era mucho más que un grupo de buenas personas que trataban de "portarse bien en el mundo". Ellos eran la representación viva de Cristo sobre la tierra.
Si bien Cristo, mostrando una vez más su inigualable poder y gloria, había ascendido a vista y paciencia de esos 500 discípulos, y físicamente ya no estaba en Jerusalén, por medio de ese grupo de creyentes, él aseguró su presencia y ya no en un lugar específico solamente, sino donde quiera que ellos iban, la presencia, la vida, la luz y el poder manifiesto de Cristo estaba presente a través de ellos.
Gente que vivió peligrosamente. Su fe no era un credo barato confesional de día domingo. Para ellos el ser cristianos era tener una sentencia de muerte sobre sus vidas, pero bien que gustosamente llevaban esa cruz, al igual que Su Maestro.
Quizá esa entrega y compromiso a la causa de Cristo les hizo acreedores del poder que había en ellos, mediante el cual experimentaron los milagros, las obras sobrenaturales del Señor y las hicieron manifiestas también entre el pueblo.
De seguro el secreto de su poder y vida abundante no radicada en predicaciones que promovían la prosperidad económica o la comodidad con el mundo (como predican los seudo apóstoles de nuestro tiempo), sino un mensaje radical que urgía a salir del mundo, a decidir que la vida eterna nos va a costar esta vida y que era (y sigue siendo necesario) calcular el costo.
Es una pena que tan ligeramente usemos las Palabras de Dios para decir que "Dios no cambia, que Jesucristo es el mismo ayer , hoy y por los siglos" (y por Dios que lo es), y que para nuestra propia vergüenza, tengamos que reconocer que hoy por hoy no hay en las congregaciones el poder y la autoridad espiritual que había en el ministerio del Señor y en la vida de esos creyentes.
Es verdad, Él no cambia, pero nosotros si lo hacemos y hemos llegado a pensar que podemos hacer la obra de Dios en nuestras propias fuerzas, usando nuestras propias estrategias, haciendo las cosas a nuestro modo. ¿¿Somos acaso más sabios que Dios?? ¿¿Es que Dios nos ha dado a nosotros más que lo que dio a hombres como Pablo o Pedro??
La Biblia dice que "todo el que fuere perfeccionado será como su maestro". Pero yo no veo tal cosa, sino sólo "grandes estrellas del jet-set evangélico" y qué poco de Jesucristo se ve en ellos. Si al menos sus palabras fueran las del maestro, pero ni eso, sólo te hablarán de como Dios quiere que seas rico y tengas todo lo que el dinero puede comprar. No hay un urgimiento a arreglar cuentas con Dios o a prepararnos para el rapto. Son falsos "profetas de la comodidad".
Yo quiero (y mis ojos lo verán), que por fin se levante un hombre de Dios de verdad. Lleno de Dios y que con autoridad de Dios ponga orden a este caos que hoy llamamos indignamente la obra de Dios. Que traiga verdadera luz a la casa de Dios, que juzgue conforme al corazón y no por apariencias. Un hombre que no haga diferencias entre el da mucho o el que apenas tiene para sustentarse así mismo. Un hombre al que le de igual predicar a uno que a mil, que no promueva sus campañas con la consigna "ven a recibir tu milagro" o "campaña de sanidad y milagros"después de todo JESÚS NUNCA LO HIZO, y si Él no lo hizo, ¿¿tenemos nosotros mayor autoridad que él para hacerlo, o somos más sabios que Él?? Y para los defensores de esta postura humana, déjame decirte que no importa cuánto des vuelta la Biblia, no encontrarás en ella sustento para justificar tal situación.
No mis amados, yo no lo voy a tolerar ni pienso hacerme cómplice de esta maquinaria religiosa humana que necesita artimañas para traer gente a la iglesia.
Si hay alguien que tenga un poco de Dios en su vida se dará cuenta que el engaño no está viniendo de afuera, son los falsos hermanos que están dentro, aquellos de los que habló el apóstol Pablo, los que están causando estragos entre el pueblo, y apartando a las ovejas del lado de su pastor. ¡¡Hay líderes que se ha apoderado de la iglesia que pertenece al Señor Jesucristo!!

Sabes hoy día yo escucho mucha gente hablar de avivamiento ¿Cuál avivamiento? De seguro no es un avivamiento de santidad, ni de poder, porque de eso estamos bien escasos, al punto que necesitamos importar gente que encaje con nuestra mentalidad de recurrir a "anzuelos" para atraer a la gente a las congregaciones. Les prometen que Dios los sanará, que Dios los prosperará, que Dios los hará felices, y si bien Dios puede hacer todo esto. NO podemos darnos el lujo de perder el norte. No olvidemos que nosotros somos llamados a continuar la obra que Cristo empezó. Jesús vino a predicar que el reino de los cielos se había acercado por lo cual era preciso arrepentirse y creer al evangelio. El evangelio es una buena nueva y la buena nueva no son las sanidades. Las sanidades son la señal del poder manifiesto de este reino que se ha acercado. La buena nueva es que el hombre perdido puede ser rescatado para Dios por el poder y sacrificio de la cruz de Cristo. Pero hoy al igual que entonces, hay líderes religiosos que tienen la mirada puesta en las cosas de la tierra antes que en las cosas de Dios.
Traemos gente de afuera con la esperanza de que en sus maletas o bolsillos o en su imposición de manos venga el tal anhelado avivamiento. ¿¿No tenemos biblias acaso en las que podamos ver que el avivamiento viene cuando los hombres se arrepienten, se apartan del mal y arreglan sus vidas delante y entonces el Espíritu Santo (que desea manifestarse) desciende y trae esa vida que falta??

Muchos de estos avivadores no harán más que confundir a un puebl0 que ya está lo suficientemente confundido con tanta basura extraña que llamamos doctrina de Dios (¡¡leamos nuevamente la biblia por favor!!. Los harán "pactar", por supuesto en términos económicos y les prometerán (como Elimás el mago) que el poder de Dios se puede comprar por decirlo de alguna forma. Y desde luego la bendición vendrá "si tienen fe". Si no la recibes (y es lo más seguro) será tu culpa. No creíste lo suficiente.

Salomón, es un buen ejemplo de este mover que hay hoy: tuvo el conocimiento y la prosperidad que los seudo apóstoles contemporáneos se mueren por tener y con todo su conocimiento y prosperidad terminó en la apostasía.
¿¿Y sobre los que vienen de fuera trayendo el avivamiento??
Bueno ellos se llevan la mejor parte... nuestro dinero. Es tan fácil como eso.
Ah, ¿¿y el avivamiento?? Dura el rato que "predican" y se va de vuelta con ellos en el avión.

Voy a para aquí por hoy, fue suficiente por hoy. Pero mientras Dios me vida y salud esto continuará. Saca tus propias conclusiones. Que Dios te ilumine

miércoles, 2 de abril de 2008

MEJORANDO LA COMUNICACIÓN CON NUESTROS HIJOS. (Pauta usada en el programa de Radio Armonía)

“La mala comunicación, o la falta de ella, está deteriorando las relaciones entre padres e hijos”

Comunicarse es un arte que vale la pena aprender. Necesitamos considerar: “lo que digo” versus “cómo lo digo”
Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada (Proverbios 12:18)
La blanda respuesta quita la ira (Proverbios 15:1)
Cuando hacemos lo correcto, de manera incorrecta, los resultados difícilmente serán buenos

Al comunicarnos podemos cometer alguno de estos errores:
Decir lo correcto, a la persona incorrecta
Decir algo correcto, a la persona correcta, en el momento inapropiado
Decir algo correcto, a la persona correcta, en el momento apropiado, de una manera incorrecta

Por tanto, al hablar debo considerar: Lo que digo, A quién lo digo, Cómo lo digo

La comunicación actual es escasa, con monosílabos:
“si”, “no”, “no se”

Es de tipo instruccional: “haz las tareas”, “limpia tu cuarto”, “no hagas esto”, “haz aquello”, etc…

Necesitamos instancias para compartir con la familia otros temas de interés común que produzcan vínculos entre los miembros.

La calidad de la comunicación es tan importante como la cantidad.
Cuando probamos algo rico, deseamos más de eso rico. No nos conformamos diciendo. Era rico y con un poco bastó. Todo lo contrario cuando algo es bueno, deseamos más.

Una buena comunicación permite entregar valores positivos y productivos. Además de conocerse

¿Conoces a tus hijos de verdad, o ellos actúan delante de ti para complacerte momentáneamente?

El domingo por la mañana hay muchas personas que demuestran sus dotes de actor o actriz durante la reunión, pero que al terminar el servicio, vuelven a actuar como lo que en verdad son.

Un elemento indispensable para comunicarse bien es:
1. Saber escuchar

Mirando a la cara
Identificando los sentimientos del otro
Asegurándote que entendiste lo que te trató de decir. Si es necesario corroborando tu buena comprensión del mensaje

Si tu hijo nota que le prestas atención, estará más abierto a compartir sus sentimientos y dudas contigo.

Esto es lo que hacen sus amigos de la calle: escucharlo sin prejuicios.

¡¡Recuperemos la comunicación con nuestros hijos y luego podremos recuperarlos a ellos!!

Que sea de bendición para tu familia, con cariño,
Pastor Gabriel Torres

lunes, 31 de marzo de 2008

Pensamientos Memorables

Después de leer, piensa y luego me escribes.

"Toda una generación de cristianos ha llegado a creer que es posible "aceptar" a Cristo sin renunciar al mundo"
A. W. Tozer

"Que la esposa haga que su marido se sienta contento de llegar a casa, y que este haga que su esposa se sienta triste cuando él sale"
Martín Lutero

"Cuando nos casamos eramos dos garrapatas que pensaban que el otro era un perro"
Anónimo

"Una de las cosas que más inmoviliza a las personas es que tratan de hacer grandes cosas. Los logros más valiosos son el resultado de muchas pequeñas cosas hechas en una sola dirección"
Nido Quebin

"Lo único a lo que tenemos que temer es al miedo mismo"
Franklin Delano Roosevelt

"Dios prepara grandes hombres para grandes tareas por medio de grandes pruebas"
J. K. Gressett

"Si dices la verdad no tienes que acordarte de nada"
Mark Twain

* Tomados del libro "El Hombre Frente al Espejo", de Patrick Morley.

¿QUIÉNES SON LOS QUE SE DESCARRÍAN?

Hebreos 2:3a “¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande…?”

Usualmente nos sentimos culpables cuando un creyente se aparta. Pensamos “si hubiera hecho algo, esto no habría pasado, tal vez este hermano todavía estaría con nosotros”.
Decimos “si sólo lo hubiera cuidado, animado o escuchado más”. Pero de haberlo hecho: ¿Estaría con nosotros? ¿Realmente alguna vez estuvo con nosotros y fue parte nuestra o sólo quería a alguien que estuviera con él o ella?

¿Por qué se descarrían las personas?
La Biblia nos enseña de hombres iguales a nosotros que sufrieron la pérdida, la enfermedad, la necesidad, y a pesar de todo eso, se mantuvieron con el Señor.
¿Será que tenemos el derecho a descarriarnos? ¿Será la voluntad de Dios que nos descarriemos o retrocedamos? ¿Quién será el responsable: ellos, nosotros, el diablo, Dios? ¿Tuvieron Job, Pablo o Cristo motivos para haberse descarriado? Y si los tuvieron, ¿por qué no lo hicieron?
Debe haber algo que explique esta situación. Hechos 8:39-40 enseña que Felipe dejó al etiope solo y este no se descarrió

La Necesidad
de una Verdadera Conversión
Una conversión genuina permanece sin importar las adversidades. Sabemos que todo árbol que no plantó el Padre, será desarraigado, y si Dios no lo plantó, ¿quién lo hizo entonces y con qué fin?
Jesús mandó a sus discípulos como corderos EN MEDIO de lobos (Lucas 10:3). Esto a muchos les parecerá irresponsable o falto de amor, pero es el método divino para probar a los verdaderos creyentes.
¡Qué contraste con lo que intentamos hacer hoy día: poner a la hermandad dentro de una burbuja llamada iglesia!
El Señor sabe de las tentaciones y peligros de la vida y sin embargo, los permite porque las dificultades exponen, sacan a luz a los verdaderos y eliminan a los falsos.
Hay personas en las iglesias que nunca producen frutos. Es más, sólo traen vergüenza al nombre de Dios. Lo peor es que el mundo al verlos dice: “y se hacen llamar cristianos”.


La Prueba
de un Verdadero Discípulo está en el Fruto
La conversión es un cambio en la manera de Pensar y Sentir. Juan bautista instaba a los hombres a hacer frutos dignos de arrepentimiento.
La Biblia dice “la raíz de los justos dará fruto” (Prov. 12:12). Luego también Jesús dijo “el que en mi no permanece se queda sin fruto.(Juan 15:5) y en Mateo 3:10 “Todo árbol que no da buen fruto es cortado”
. ¡¡No basta con producir decisiones, Dios busca discípulos!!


El Creyente que es Terreno Pedregoso
(Marcos 4:13-20)
Responde pero carece de profundidad. No tiene raíz y aunque recibe con gozo, sólo cree por un tiempo. Dios puede ver debajo de la tierra. El sol prueba las plantas. Dios usa 3 elementos para probar: Tribulaciones, Tentaciones, Persecuciones.
Encontraremos personas que no desean cambiar porque no han nacido de nuevo. No leen la Palabra de Dios, ni oran porque no les nace hacerlo, no está en su naturaleza, porque aun son un producto de la carne Todo cordero sano tendrá apetito. No necesitarás convencerlo de que tiene que comer. Buscará el alimento.


La Aptitud Para
Seguir a Cristo (Lucas 9:62)
El que mira para atrás simplemente NO ES APTO. La palabra Apto: Eutheto en Griego, significa “listo para ser usado”.
Pablo menciona hermanos aptos y a otro que no lo era. En la carta a los Colosenses 4:7-14, menciona a Demas, quien no contaba con la aprobación de Pablo. El apóstol veía venir algo en Demas, su descarrío y su traición a la causa de Cristo.
Por tanto, para que una planta produzca fruto debe ser puesta al sol. La falta de luz impide el crecimiento y como cristianos verdaderos no debemos temer a la tribulación, tentación y persecución, porque ellas prueban al convertido, lo afirman, lo hacen crecer y edifican, en tanto que al no convertido lo separan, se marchita y muere.
Pablo habla de falsos hermanos, quienes no son creyentes genuinos. Gente que siempre está buscando “algo” que excuse su mal accionar, pero lo que necesitan es arrepentirse, convertirse y cambiar.

¡¡Todo el abono del mundo no hará crecer una planta defectuosa!!

Jesús no siempre estuvo disponible, a veces se escondía de la gente. El conocía a los que son sólo oidores y que nunca obedecen la Palabra

domingo, 30 de marzo de 2008

¿ERES PADRE Y ESTÁS EN PROBLEMAS?

Quiero participarte de esta bendición que el Señor me ha dado. Si estás batallando con la difícil tarea de educar y criar hijos, quiero invitarte a sintonizar Radio Armonía (106.3 fm) los días miércoles de 16 a 17 horas el programa "Nunca es Tarde". Estamos compartiendo principios bíblicos para ayudar a nuestros hermanos en esta desafiante misión que el Señor nos encomendó de ser padres.
Yo sé que todo buen padre haría cualquier cosa incluso dar la vida por sus hijos. Y si estamos tan dispuestos a morir por nuestros hijos, ¿¿por qué no estar más dispuestos a vivir por ellos??

MI UNIVERSO

Me pregunto si Jesús Adrián Romero dimensionó la profundidad de su alabanza "Mi Universo".
¡¡Si eso es exactamente lo Jesús espera ser para nosotros!! Nuestro mundo, nuestro universo, nuestro todo.
Los planetas en nuestro sistema solar giran en torno al sol, y aquellos pequeños planetas, son bendecidos por el astro mayor.
Jesucristo es nuestro Sol de Justicia y si nosotros giramos en torno a Él, sin duda alguna, nuestras vidas serán bendecidas recibiendo de Él su calor, su luz y su vida.
Haz de Cristo "el primer aliento en la mañana y la luz de tu ventana", verás que con Él, la vida si tiene color.